El concepto Arte en el espacio público se viene designando desde los años 60 aquellas tendencia de muchos artistas a sacar sus obras de los museos y a integrarlos en el espacio urbano. Desde entonces una joven generación de artistas se ha involucrado a lo público desechando el espacio nítido museal. Ahora mismo el espacio público confronta nuevos condicionamientos urbanos, historicos, politicos y sociales, lo que hace del artistas público un activista y un nuevo ciudadano. El objeto fundamental del Arte Público es desmitificar el concepto de creatividad… Nuestra intención es convertirnos de nuevo en ciudadano.

sábado, 9 de mayo de 2009

Ciudad sin héroes (por Douglas Garcia)



Qué sería de un héroe que se valore sin un archienemigo que tenga la oportunidad de salirse con la suya, y que será de un villano sin un héroe a quién ponérsela difícil. Desde luego, este antagonismo por lo general tiene a un ciudad como campo de batalla, la cuál por arte de magia y/o por un eficiente servicio de obras públicas es rehabilitada de todos los estragos que los combates escenificados de manera expedita, a tal punto, que siempre la ciudad se encuentra lista ante el riesgo de una futura confrontación que pueda destruirla de una vez por todas.

La defensa o la destrucción de una ciudad lamentablemente no es una invención de los cómics, sino el reflejo de la acciones que tuvo su génesis en la destrucción de Troya donde combatieron y murieron héroes de la mitología griega, también se encuentra la devastación bíblica por medio del azufre y fuego de Sodoma y Gomorra o el fin de la valiente Cartago por el imperio romano, no obstante y con el trascurrir de la historia la ciudades pasaron a ser un botín preciado que se rendían luego de una derrota en el campo de batalla, esto cambiaría con sus excepciones en el siglo XX con la guerra civil española cuando la crueldad y la infamia creó nuevos escenarios bélicos al bombardear a civiles indefensos en ciudades como Barcelona, Guernica o Madrid. Este hecho se reprodujo a lo largo de la 2da guerra mundial con los bombardeos a Varsovia, Londres, Dresde, Stalingrado, entre muchas, teniendo como la excepción a París la cual fue respetada e incluso fue salvada por un enemigo, el general alemán Dietrich Von Choltitz que por amor a esa ciudad desoyó las ordenes de un furibundo Führer que deseaba ver la ciudad luz en ruina ante que entregada… siempre nos quedará París. La devastación atómica de las ciudades de Hiroshima y Nagasaki significó el más cruel desenlace para una guerra sangrienta, el fin del principio, porque la destrucción de las ciudades no se detuvo allí, terribles ejemplos hemos tenido desde aquel entonces, ciudades como Hanoi, Beirut, Sarajevo dejaron constancias que subyugar a una urbe desarmada socavaría la moral de una población beligerante, por lo tanto, las metrópolis pasan a ser los nuevos blancos estratégicos, pero esta manera de reducir al enemigo no contenía ningún honor por lo tanto no genera héroes militares. Actualmente, las ciudades experimentarían otro tipo de guerra, la del terror o terrorismo, la cual cambiaría la nomenclatura de héroes a mártires.

La destrucción de las Torres Gemelas en la ciudad de Nueva York, sería uno de los más brutales ejemplos del terrorismo mundial, siendo las ciudades los objetivos más valorados. Este acontecimiento llevó que los cómics y al séptimo arte sacara a todos los superhéroes de nuevo para levantarle la moral a una nación, que a su vez, trasladaba el terrorismo a la legendaria Bagdad por pertenecer al eje del mal. Esta ciudad que su nombre traducido del persa significa “el regalo de Dios” han muerto casi 4,000 soldados americanos, la mayoría por ataques furtivos de terroristas mártires que usan las calles para las emboscadas, posiblemente, la solución de este conflicto que desangra las calles y la invencibilidad de un ejercito radicaría que el presidente Obama retiré las tropas de Irak o que envíe al Capitán America en el Air Force One como refuerzo.

Regresando a los superhéroes, como bien sabemos la mayoría de estos personajes tiene doble personalidad, y esta psicopatica vida no los hacen muy diferente a los villanos, incluso, no les hace diferente a los ciudadanos de las grandes capitales, claro, eso de ocultar sus verdadera personalidad hacen de héroes y villanos individuos difíciles e inestables, cosa que de nuevo los acerca notablemente entre si, tanto es así, que ambos manejan los mismos temas, las mismas armas, poseen traumas similares y a menudo gustan de la mismas mujeres. Pero quizás, lo más difícil que puede afrontar un superhéroe es sobrevivirse al engreído ego de otro superhéroes, y la ciudad que más héroe ha tenido en ese sentido es la ciudad de Nueva York, incluso un antihéroe como Spawn eligió esa ciudad para refugiarse, todo debido a que esta ciudad es la más cosmopolita del planeta y porque es la referencia inmediata de los ilustradores de la editorial Marvel Cómics y la DC Cómics las cuales están radicada en la gran manzana.

Para cualquier hijo de vecino que carezca de súper poderes puede ser aterrado imaginarse a una ciudad como Metrópolis sin Superman, sobretodo, cuando se desconoce que atractivo tiene esa ciudad que no sea la figura de Superman. De seguro, y pensando en la arquitectura esta ciudad tiene que contar con un centro urbano mecanista, lleno de callejones y poblado por edificios con más de 40 pisos de altura que en su mayoría estaría diseñado por Calatrava. También puede ser aterrador imaginarnos a una ciudad como Ciudad de México o Medellín con un superhéroe, porque estas son de esas ciudades que no admite héroes que abrillante las historias de supervivencia de los marginados e impotentes ciudadanos de las periferias.

En el caso de ciudad Gótica, para todos es de gran consuelo saber que es la ciudad que más psicópatas le ha dado a las historia de las ciudades, tal vez, la mezcla de arquitectura entre Gehry y Gaudí sean la causante de la diversidad de malhechores que merodean en ella, pero incluso el uso de la analogía entre esa ciudad y las nuestras no es reconfortante, a pesar de ser muy divertida, y es que la realidad fantástica de cómics suele adjetivizar nuestro surrealismo. Primeramente, ciudad Gótica cuenta con un héroe que es un millonario aburrido y filántropo que va por la vida creyéndose quirópteros, por lo que no duerme por las noches esperando su señal en el cielo de la ciudad, el mismo cuenta con un joven maravilla como asistente de hazaña, pero creo que Tim Burton tiene razón, este héroe esta mejor sólo. El caso es, que si Batman viviera en una ciudad como Caracas o Río de Janeiro tendría un millón de razones que entre hampa común, mafia nacida del narcotráfico, incluyendo las fiestas para andar insomne por las calles librando batallas y batallitas a bordo de un tuneado batimovil,.. Pensándolo bien si nuestras ciudades necesitara dado el caso a un superhéroe, seria uno que vuele o que se guinde como el hombre araña porque en nuestras ciudades el tráfico es otro enemigo a vencer, y claro que este héroe no tome ninguna postura política como porque sin caer en provocaciones que nos remitan al Terminator gobernador del estado de California, de seguro habrán gobiernos municipales que liciten el apoyo de un héroe que les proteja a la vez que le proporcione votos.

Como lo he indicado anteriormente, las ciudades no necesita héroes, porque en ella todos somos héroes a la vez que villanos, somos los ciudadanos lo que salvamos y destruimos a las ciudades, y lo hacemos sin pensar en ella, definitivamente, la ciudad no existe en nuestro imaginario colectivo mientras circulamos en ella, sólo aspiramos a una ciudad cuando nos encontramos en ciudades extranjeras, ajenas, cuando dejamos de ser ciudadanos para pasar a ser desnudos turistas, es entonces, que pasa la ciudad se merece un obelisco por su perseverancia a existir, y más aun, que la ciudad de nuestros sueños deja de ser un espacio para pasar a ser la madre de nuestra ciudadanía.

...Entonces, de que le sirve un superhéroe a una ciudad cuando en realidad lo que necesita son menos enemigos.

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